El término japonés "bonsái" significa "plantado en una maceta". Un bonsái es una obra de arte viva, una perfecta planta en miniatura, idéntica en todos los aspectos a su símil de tamaño natural, pero varias veces más pequeña.

En el juego de mesa "Bonsái", los jugadores asumen el papel de expertos maestros del bonsái que intentan cultivar su propio bonsái.
Quien cultive la mejor planta será designado para mostrar su bonsái en los jardines Imperiales.

En tu turno, elige y realiza una de estas dos acciones: meditar o cultivar. Si meditas, elige una de las cartas boca arriba del tablero y tómala, junto con las fichas de bonsái representadas debajo de la carta que robas.

Si cultivas, podrás colocar en tu bonsái las losetas que tengas en tu reserva personal. Puedes colocar tantas fichas como el total de símbolos representados en tu ficha de seishi y en cualquiera o en todas tus cartas de crecimiento. Cada símbolo te permitirá colocar una ficha del tipo correspondiente.

Durante el turno en el que tu bonsái iguala o supera los requisitos de una loseta de objetivo que todavía está en el medio de la mesa (es decir, la loseta de objetivo aún no ha sido reclamada por ningún jugador), debes elegir inmediatamente si deseas reclamar esa ficha o si quieres renunciar a ella para intentar conseguir una ficha de objetivo más difícil.

Cuando se revela la última carta del mazo, se activa el final de la partida. Cada ficha de tu bonsái vale una determinada cantidad de puntos.